Generalidad Valenciana a través de su Instituto Valenciano de Finanzas, formando así una Comisión Gestora con todas las partes con voz y voto durante las tres fases del proceso de venta. El club se desvincula de hasta 12 jugadores, no renovando la cesión de 8 futbolistas y rescindiendo el contrato de otros 4 más, logrando deshacerse de ese modo de jugadores de muy bajo nivel como David Costas, quien con múltiples errores de bulto había lastrado las posibilidades del Almería en su lucha por el ascenso a Primera División en la temporada anterior.