Versionó numerosos productos típicos de Chanel, como su traje de dos piezas o su «vestidito negro», que modernizó en una versión de vinilo y punto liso de poliéster. Gianfranco Ferré destacó por sus líneas de prêt-à-porter de formas definidas y colores brillantes, con un diseño intelectual que denotaba una gran preocupación por el detalle.